No sé qué es escribir, y es su cumpleaños
No sé qué escribir, es tan loco el saber que han pasado dos años, y yo continúo posteando a veces ya cualquier cosa (mi entrevista) o que le hago promoción a mi primer hijo (del cual ya no me queda ni uno).
Solo quiero agradecer a todos los que han seguido mi blog durante este par de años. Creo que mi estadía en USA mermó las visitas de aquellos a los que siempre solía comentar. Las razones están escritas.
Y también que este año publiqué menos, pero me dediqué a corregir más, lo que no quiere decir que no haya escrito (o leído)
Es algo que me apasiona, no sé a cuántos le pasará lo mismo, pero a veces puedo dejar de comer o irme caminando a la universidad o el trabajo, solo por comprar un libro. Es la única verdad.
Ahora trabajo en una librería, así como en el verano (invierno para mí) en un fast food. No ha cambiado en nada, la gente sigue pidiendo lo que a mí no me gusta.
Y aunque me asusté en un comienzo porque pensé que así como ahora detesto las burgers, iba a ocurrir lo mismo con los libros (verlos, acomodarlos, venderlos a diario). Sin embargo, no fue así y eso jode porque mi primera paga se me fue en cuatro de ellos. Es cagado, lo sé.
Y no sé por qué estoy escribiendo esto, ya que en web-ad-ass no suelo declarar sobre mi vida personal, no soy de publicar lo que me pasa como en otros blogs, los cuales tendrán sus razones. En mi caso siempre preferí los cuentos o artículos, que tampoco están desligados de los que soy, de mis demonios.
Mi timidez que muchos confunden con extravagancia es la que me lleva a escribir siempre sobre mí, pero nunca explícitamente.
Lo digo porque "leyendo" en retrospectiva, mi blog es eso: Mi vida, el lugar donde grité todo lo que no podía decir, pero a la vez sin decirlo.
Me sucedía algo y lo transformaba en cuento, solo para pasar piola y pensar que no soy yo de quien hablo, cuando a veces me hubiera gustado engraparme los ojos o ayudar a la niña del globo, morir con los libros y seguir conversando con mis creaciones.
Que así como los hijos, son parte de uno.
Me queda agradecer a aquellos que en su momento me leyeron, a todos los que nunca respondí, a los que siempre respondí, a los que comenté y nunca recibí nada a cambio, a los que comenté y me dijeron que era un maldito spaner (y que me iban a acusar con su mamá, kiko) a los que dejé de comentar porque ahora nos comunicamos por msn.
Y es esa misma vergüenza sana que me impide poner sus nombres, aunque ellos saben muy bien quiénes son (yo a veces no)
Mi blog es para todos ellos.
Es lo poco que puedo hacer para confirmarme que existo.
Porque a las finales, aquí están todos los cuentos que se convirtieron y se seguirán convirtiendo en libros
que es lo que adoro.