Cuando ella se me acercó muy estimulada por la música, ah “Otaner”, tú si que la sacas de su árbol, me dio un largo y apasionado beso, el cual retribuí choteando a mi buena y fiel compañera en la soledad, no, mi mano no, mi guitarra pe tío –me gustó mucho esa canción-, -¿y eso?-, -es por ser así de lindo, no dirás mucho directamente, eres tímido, lo sabes, todos los músicos lo son, tus sentimientos te los guardas para tus canciones, y eso, eso vale más que mil poco-floros- wau, Ay mi Carmen tú sí que me conocías a la perfección y le dije sonriendo –eres una m. . . -, -soy una mierda, pero ¡cómo haces que esta mierda se tiemple cada día!- My, my baby blue, Yeah, I've been thinking 'bout u, My, my baby blue, Yeah, you're so jaded, And I'm the one that jaded u
-Oe Carmen tienes algo para el chukake-, -en el cajón de mi cómoda creo que debe de haber-, -a ver- wazu cuántas pastillas, puta mare, ta qué pepera es esta ona, pucha, noo, a ver, a ver, no jodas, Diazepam, Valium, Diazepam, Valium, Valium, Diazepam, ¿Prozac? y de la wena ¿qué pasa aquí a ver? –óooyeeme mamita- le agarré de la muñeca -¿qué tienes oe? duele-, -¿qué chucha es esto?-, -mis pastillas ¿qué mierda haces buscando mis cosas?-, -no he estado buscando nada, sólo quería unas aspirinas pero ¿de qué se trata todo esto?-, -déjalas donde estaban ya-, -ah, no mamita, no pasa nada ¡me das toda esta mierda, ahoraa!-, -¡suelta mierda!- la empujé contra su cama –¡maricón!, ¡quién chucha te crees oe, no eres mi viejo!-, –¡estás webona!, ¡no ves que esta webada te caga el checo!- seguía en su cama mirándome con odio –¡DE-JA-MIS-CO-SAS!- gritó exasperada –flakita, es por tu propio bien- empecé a meter todas las cajas en mi mochila, excepto claro las anticonceptivas, y las del día siguiente y mis Durex ¿oe qué? yo no compré ribbed –no me jodas- se puso como histérica y forcejeó para quitarme la mochila, y al hacerlo se iban cayendo todas de a pocos –¡dame mis pastillas!- se había puesto como loca –¿sabes qué?, ¡VETE A LA MIERDA! no sabes que esa webada es la que te pone como zombie, cada mañana, ¡cojuda! no ves que no me gusta verte así ¡como una drogadicta de mierda!-, -¡cálla huevonazo que tú no entiendes nada!-, -no ¡tú no entiendes nada pendeja! no sé quién chucha te ha dicho que esa webada es la solución- me miró con odio y me arranchó la mochila –todos tenemos problemas manyas pero-, -puta ¿tú qué sabes huevón?-, -sé tanto como para decírtelo-, -calla mierda, tremendo fumón y me vienes a decir que no me drogue-, -la marihuana es tranki, con esa webada no pasa nada-, -ay sí, acaso yo me meto con tus gustos-, -mierda que no sabes que esa webada son químicos, que la marihuana es nátural, puta que tú eres la ignorante de mierda que no sabe nada, puta mare ¡no quiero volver a ver esas cojudeces por acá!- cogí un puñado de pastillas y las tiré por la ventana –¡me entendiste mierda!-, –nooo, nooooo- salió corriendo para intentar alcanzarlas, pero la contuve por la cintura –¿qué mierda haces?- nos caímos al piso –tú no entiendes, tú no entiendes nada mi “Otaner”, no entiendes nada- me golpeaba hasta cansarse y abrazarme llorando –te entiendo y sé que pasa- me miró con sus ojos hinchados -no, no lo sabes, no sabes nada- . . . I'm not afraid, of anything in this world, there's nothing you can throw at me, that I haven't already heard, I'm just trying to find, a decent melody, a song that I can sing, in my own company . . .
-Oe flaca, ese 'on del Javier me ha dicho pa ir al tono del “Chato-mario”-, -¿y quién chucha es ese ’on?-, -El Javier pe-, -no mierda, hablo de ese “Chato” maricón-, -“Chato-mario”-, -igual da-, -es un chato, que sí es medio cabro, pero buena gente, para qué el pata, el chatito-, -tiene plata ¿di?-, -seee-, -sangrones de mierda-, -ja, ja, ja-, -si no tuviera plata, lo discriminarían seguro, porque tú y el Javier, son unos tremendos . . .-, -oe, bah, bah, bah ¿no era que te gustaba ese ‘on?-, -ojo que una cosa es que me guste, su físico, su floro, pero de allí, a más, me parece un pobre y triste imbécil, es más creído-, -bueno eso sí, y veo que recapacitaste, pero no me vas a negar que es un cague de risa-, -ah no eso ni hablar, ahora tú lo defiendes- hice como si no hubiera escuchado eso -puta que te contó de la vez que lo encerramos al auxiliar en el ñoba con candado-, -ahh, si, si, ja, ja, ja, que wina-, -y esa fue idea suya, ah, o cuando nos orinamos en la jarra de chop que iba pa los de quinto- luego más seria -¿y nadie se ha burlado de él?-, -no, que yo sepa, ese ‘on lo haría desaparecer del planeta- See myself in the pouring home, see the light come over now, see myself in the, pouring rain, I watch hope come over me -sólo déjame jugar y verás- . . . yeah, yeah, here we are now, going to the east side, I pick up my friends and we start to ride, ride all night, we ride all day, some may come and some may stay . . .
Recuerdo la vez en que Carmen me invitara a comer a su casa, y su vieja me mandó a comprar la lechuga (de la cual, no tenía la menor idea de cómo era cuando estaba buena o no, y maldije la hora en que no presté atención a mis viejos quienes me comentaron que tu tío, o sea mi hermano hacía el mercado con tu abuela, la tuya, y por eso él sabe elegir muy bien, y no le pueden engañar) el caso es que compré cualquier porquería verde, al fin y al cabo, yo no solía comer lechuga, algo que se convirtió alguna vez en una bendición ya que fui el único de mi familia que no se intoxicó, una vez que la empleada lavó mal la susodicha para la ensalada, al menos yo no terminé ocupando el baño más que las veces regulares –de entrada, su Ocopa-, -wazu gracias- carajo qué mierda esta cosa verde . . . ¡cómo pica esta webada! ta mare odio el picante –joven ¿le gusta la Ocopa a usted?-, -oh, sí claro, si está deliciosa, por su puesto ¡qué rico!-, -Renato, la he preparado yo-, -oh sí, deliciosa como tú-, -¿cómo dice joven?-, -no, que me como sus cabellos, digo como sus cabellos-, -¿cómo?- sabroso, je, je, je -digo- mierda la estoy cagando, ta mare –eso sí, no hay lechuga-, -disculpe señora es que no sabía cómo . . .-, -no te preocupes hijo, de los errores se aprende- si pues espero que su hija aprenda pronto a medir el nivel de rocoto, pa mí que lo ha hecho con segunda la vivaza –¿y te gusta? pero de verdad, ah- puta pero que pendeja es esta 'ona carajo –no, sí, ta bien rico-, -a ya porque en el segundo también he intervenido yo- nooooo, por favor, NO, bueno, pero mientras no le hayas echado Campeón en vez de pimienta . . . una de dos, si esta flaca no me revienta la próstata, me caga el hígado. Al final de cuentas el cabrito, no estuvo tan mal –si quiere puede repetir joven-, -no, gracias, señora ha estado muy rico- y luego –ahora de postre un poco de frutas para atenuar las grasas- azu mare ¿postre? -ya, no, gracias, paso- ta que me han visto o muy flaco o muy gordo, no sé, espero que lo primero -hay hijos, yo los dejo, porque tengo una reunión en el colegio, cuidas a tu hermanita, ya-, -sí mamá-, -se quedan al cuidado de la casa, bueno chau-
Ahora sí más relajado –mira he traído unos videos-, -espera que traigo unas naranjas- nos sentamos a ver el concierto de Eminem, ella trajo un par, muy aparte de los limones –oe y el plato-, -¿plato? ja, ja, ja, no me digas que también quieres un cuchillo-, -si-, -yo lo como así nomás- y con sus caninos empezó a desnudar a la naranja-naranja –¿no te pica?-, -no, a ver espera, que le traigo su cuchillito y tenedor a la señorita nice-, -no me jodas, sino que luego me pican los labios y aparte no me gusta enmelarme todo-, -ay sí tú- respondió a mis exigencias y empecé a partir la naranja en 4/4, mientras escuchaba toda la joda que me hacía –si te viera Eminem, apuesto que improvisaría algo que te dejaría en más ridículo del que ya estás- viéndolo desde este punto, sí. Lo peor, o quizás lo mejor, es que no pude evitar que una avalancha de gotas empapase mi cuello –caaraajo, esta naranja- situación que a Carmen no le fue indiferente, pensaba que se iba a burlar, pero se acercó a mí, me agarró de los cabellos, dirigió mi cabeza hacia el techo y empezó a lamer por todo mi cuello, qué rico se sentía el ser acariciado por esa lengua dantesca, que describía esos singulares círculos concéntricos que hacían bombear sangre rumbo a mi entre pierna, de pronto se detuvo, me miró con su ya conocida sonrisa, se levantó el polo, me mostró sus hermosos senos, y fue chorreando su naranja por su par de cerritos, me arrodillé entre sus piernas y me abalancé sobre ellos; dejé que mi instinto fluya, qué delicia la de mezclar zumo de naranja con su sudor, y sí que tenía razón Dios: “comerás el pan con el sudor de tu frente”, pero no comí pan sino de la fruta prohibida, y no del sudor de la frente, aunque sí del frente, y qué ingeniosa mi flakita, ahí en su mueble, donde las primeras acciones se suscitan, le subí el vestido y le bajé el calzoncito de osito panda, mi lengua salió a bailar entre sus piernas, y yo sentir sus manos arañando mi cuero cabelludo, sus gemidos gregorianos, y cuando ella me lo pidiese, mi falo siempre ávido por jugar a las escondidas dentro de su cuerpo, -ya, ahora- era el turno para que mi cabeza juegue con esos, sus labios, y ella me ahorque con su ligereza rosada, no me permitiera salir jamás –ni se te ocurra, no, no, no, si, si, siiiiaa, te-mmo- mientras mis labios seguían succionando sus dos hitos sobre dos suaves lomas y blancas, y mis manos masajeando y dirigiendo su parte trasera al ritmo de, de, de, ehh. . . And I am, whatever you say I am, If I wasn't, then why would I say I am?, In the paper, the news everyday I am, Radio won't even play my jam, Cause I am, whatever you, say I am, If I wasn't, then why would I say I am?, In the paper, the news, everyday I am, I don't know it's just the way I am . . .
One night in a disco, chillin' with my friends, feelin' kinda low, I was sitting on a fence . . . En la jato del “Chato-Mario” . . . siempre hay tono. Lo mejor era que sus viejos viajaban mucho y lo dejaban a cargo de su hermana mayor, quien aprovechaba para quitarse al depa de su novio y pernocchar ahí –una con una pe mi querido Renato-, -Veste “Chato-Mario”-, -oe manya que te presento a una amiga: Carmen-, -hola-, -hola-, -me han hablado mucho de ti-, -ala qué miedo-, -no, pero no te preocupes, no es nada de malo, vacílense, ya sabes Renato cómo es-, -sí, no te preocupes, yo le explico-, -tengo que atender a los demás invitados, permiso- bueno la entrada al tono, previa invitación, tenía dos vías, o bien portarse con la chancha o traerse un trago, por mi parte, yo no pagaba entrada, ya que el Javier me cubría esta vez –mira el primer piso es pa los baila’ores, y los que quieren chupar, el tercero es pa los lanza’ores, ahí siempre aterriza mi nave-, -¿y el segundo?-, -ese es pa las parejas-, -ah ya-, -están los cuartos, los quintos y los sexos-, -y allí es donde el Javier me espera-, -sip-, -bueno, será mejor que suba entonces-, -te acompaño-, -no . . . déjame jugar. . . sola- . . . I feel - so high, dancing - all night, you blow - my mind 'cos you're - so fine . . .
Honestamente considero que tengo un falo standard, lo malo es cuando hace frío o me emborracho demasiado ya que no pasa nada con el mismo. Carmen llegó a ganarse de mi debilidad y simpleza cuando una tarde no coloqué el cerrojo a la puerta del baño y no sé si lo había hecho a propósito o por inercia, el caso es que abrió y me vio, aunque sinceramente, no debe de haber visto casi nada, bueno vamos, no estaba tan pequeño tampoco. La joda llegó cuando su madre que había venido del mercado –a ver Carmen, invítale unos manís al joven- me miró y se echó a reír, tanto que le salieron hasta lágrimas, yo puse una cara de palteado, pero asolapada nomás con una sonrisa piolín, aug, solito caigo caaraajo.
Esa noche Javier estuvo tan feliz, que chupó como si hubiese clasificado al mundial, realmente no sé por qué pero le hacía feliz el saberse ganador del "sí" de Carmen, es que muchos deseaban ello, algunos habían logrado una noche de agarres, pero jamás se conocía que hayan "estado" con legalmente con ella, porque Carmen era muy difícil y muchos patas le tenían un respeto que lindaba con el miedo -no 'on de agarres no se pasa con esa flaca, porque hoy agarra contigo y mañana . . .- ahora el temido y respetado Javier podría jactarse de eso, y adornarlo aseguraría una muerte muy dolorosa. Yo también, no puedo negarlo me la pasé chupando esa noche, y para ponerme suave, un par de tronchos, es que no podía creer cómo esa ona le había dado el "sí" a tremendo idiota, y encima el muy baboso, con segunda, lo sé, viene y me agradece, pendejo, yo sé que tú sabes, caaraajoo ¡me quiero quitar de este bullicio de mierda! –“Otaner”-, -Carmen-, -oe, ¿qué haces allí?-, -nada, hueveando, tratando de ver algo de tele-, -¿los teletubies?-, -ahh, no, no taba haciendo zapping- se sentó en la cama, a mi lado –¿y el Javier?-, -abajo, chupando, con sus “patas”-, -ah-, -¿y por qué no estás abajo?-, -no, puta que esa huevada no me vacila, yo prefiero lanzar-, -sí pero tas con un tufaaazo-, -no, ja, ja, ja, ap- me está besando, en verdad ¿estamos agarrando? ta que rica lengua, será bueno acariciar sus senos, fácil que se paltea, estuve levantando mi mano izquierda rumbo hacia su pecho derecho, pero me contuve, no, mejor no, aun así, al parecer ella se ganó, carajo esta ona se gana con todo, y dirigió mi mano hacia su seno, siempre por encima de su ropa, continuamos besándonos, cuando estábamos por echarnos –ta mare con estos ones, ensuciando mi baño y el de mis viejos espero que no esté tan . . .- volteamos y el “Chato-Mario” sonrió, cerró ambos ojos y luego nos lanzó una mirada compresiva, terminando por volver a cerrar la puerta, alcanzamos escuchar un –flacas, saben qué, a mis viejos no creo que les vaya a gustar . . .- One more time... One more time, We gonna celebrate, Oh yeah, all right Don't stop dancing, One more time... One more time, We gonna celebrate, Oh yeah, all right, Don't stop dancing . . .
Road trippin’ with my two favorite allies, Fully loaded we got snacks and supplies . . . Recuerdo como inició la tarde más hermosa que pasamos, nos habíamos sentado en su azotea a lanzar. Su vieja estaba en una reunión, su hermana, durmiendo en su cuarto, con la skan en su punto y el sol de media tarde no quemaba sino que dejaba pasar una fresca brisa que se llevaba los cabellos de Carmen, y un poco los míos en diferentes direcciones, pero siempre hacia el oeste. Ella se echó sobre mi panza, le acaricié los cabellos, se le notaba tranquila, cerró los ojos, y se acurrucó en mi pecho, cómo me gustaba enredar mis dedos en sus cabellos –te los voy a orquillar-, -no, tú haces que ellos estén sanos- ¡qué paz se sentía aquel jueves por la tarde!, algo que no había vivido jamás con nadie –yo tampoco- ella me había salvado, tú me has salvado "Otaner". . . just a mirror from the sun, Just a mirror for the sun . . .
Cuando empezó a correr más viento, y por consiguiente a hacer un poco de frío, tábamos con ropa de verano -vámonos al mueble pa' ver que están dando en Mtv-, -sí, ya empiezan los 10 más pedidos y quiero grabar el video de Coldplay-